Los que nos conocéis bien de cerca sabéis que tenemos una profesión bien curiosa.
En ocasiones, nos toca meternos unas palizas de carretera considerables, hemos llegado a tener dos casas de alquiler simultáneas más la propia nuestra e incluso, hemos montado oficinas improvisadas en plena naturaleza en diversas ocasiones, así como puestos de mando con mesas y sillas y tienda de campaña gigante para poder tener sitios donde resguardar los drones y los ordenadores del calor o la humedad.
Hace poco estuvimos realizando unas filmaciones aéreas en el norte de Extremadura, y de ahí viene esta imagen que nos robaron en la que se nos ve trabajando al solecito. Todo un placer el poder trabajar fuera (cuando hace buen tiempo…).